Presentación

ASOCIACIÓN SIBILAS deATIENZA


Atienza pesa.
Nuestro patrimonio nos enorgullece, pero nos obliga.
Parte de nuestra herencia y la de los pueblos vecinos ya está a salvo en los museos, pero aún peligran otros valores cada día más frágiles: agua, aire, paisaje, paisanaje, literatura, historia…

Nuestro deber sería incrementar el patrimonio común, pero solo conservarlo requiere tal esfuerzo que ningún brazo sobra. Estar divididos, en estas circunstancias, es un lujo que no nos podemos permitir. 

Durante agosto de 2007, algunos veraneantes cambiamos la cómoda pregunta de siempre ¿Qué han hecho este año en Atienza? por otra más eficaz: ¿Qué podemos hacer para el próximo año?  Decidimos, pues, arrimar el hombro. 

Tras tertulias informales, nos reunimos más de una docena de personas. Solo un par de tardes fueron suficientes para elaborar los estatutos de la Asociación. Eso sí, consensuamos palabra por palabra nuestro objetivo:

Buscar el bien general de Atienza y comarca, al margen de intereses partidistas o particulares: en los aspectos ciudadano, cultural, urbanístico, medio ambiental, etc., y así fomentar todo lo que una a los Atencinos, censados o no, y crear un estado de opinión favorable a estos fines que influya en el futuro de la Villa y la Comarca.
Decidimos legalizar la Asociación… y aquí estamos.

Hemos de reconocer que nos asaltó la timidez pues, aunque paguemos nuestros impuestos, al no pasar el invierno aquí, nos sentíamos como intrusos. Estamos, no obstante, convencidos de que la Asociación dará plenos frutos cuando los de fuera seamos minoría.
Nos atreveríamos a decir que no hemos elegido el nombre de Sibilas de Atienza sino que la pintura más viajera del Museo de San Gil nos ha elegido a nosotros y la propia tabla nos indica no solo la orientación sino incluso el camino. En efecto: 

  •     El origen de las tres Sibilas representadas es dispar, como nosotros.
  •    Son mujeres. Mujeres con temperamento, como las de Atienza. Queremos, necesitamos compaginar su inteligencia, sensibilidad y coraje.
  •     Aunque las Sibilas eran sacerdotisas paganas y probablemente las de Atienza las pintó un judío, no obstante, han convivido en nuestras iglesias durante casi 500 años con santos católicos. Así nosotros: aunque de diferentes creencias, la Ética es el substrato común que nos impele a buscar el bien de la Villa y Comarca.
  •         En la parroquia de Bochones también están presentes. ¿Por qué no dejarnos contagiar por la capacidad de organización de los pueblos vecinos y trabajar juntos?
  •         Su mensaje, repetido en las filacterias que enmarcan sus rostros, nos invita a confiar en el futuro.  En nuestra corta andadura, el futuro del año pasado, hoy ya presente, nos empieza a sorprender.




Tú que estas dispuesto a obrar el bien
Con lucidez, sensibilidad y coraje,
Procedas de donde procedas
Creas en lo que creas…
¡Tú eres de los nuestros!


Ven pues con nosotros a mejorar Atienza



Atienza, agosto 2008
Publicado en la revista de Fiestas